Vaso monumental de porcelana policromada de Sèvres montado en bronce dorado, Francia, finales del siglo XIX. Presenta la marca de la manufactura Sèvres y la firma del pintor Georges Maxant. Medidas: cm H 157 x L 58 x P 45. Base: 37 x 37 cm Precio a negociar reservado Objeto acompañado de nuestro certificado de autenticidad. El vaso, de grandes dimensiones, fue realizado en Francia, manufactura de Sèvres. El vaso de porcelana pintada, con forma de ánfora, con tapa, está decorado con elementos de bronce cincelado y dorado. La porcelana está pintada en azul cobalto, característico de la manufactura, decorada con adornos florales clásicos en oro y en el centro, en marcos ovoidales, se presentan dos escenas que retoman los temas característicos de la pintura Luis XV francesa. Pintadas por Georges Maxant, como sugiere la firma, representan a Venus entre cupido y amorcillos, en un lado, y a dos amorcillos en el otro, descritos en paisajes bucólicos con espejos de agua, plantas, variopintas flores y suaves nubes. Lateralmente, dos aplicaciones de bronce dorado cinceladas con forma de bustos alados de gusto clásico, embellecen las líneas del vaso. Igualmente las hojas de acanto en la base del cuerpo del vaso, cerca del tallo. El conjunto reposa sobre una base de bronce dorado con aplicaciones, en los cuatro lados, cinceladas con motivos Luis XV. La Manufacture nationale de Sèvres es una de las manufacturas de porcelana más célebres de Europa con sede en Sèvres, Francia. En 1740 se fundó una manufactura de porcelana en Vincennes por voluntad de Luis XV y Madame de Pompadour. Trasladada luego a Sèvres en 1756, esta manufactura, aún activa, ha sabido evolucionar con los tiempos y, gracias a la excepcional calidad de los productos, es muy solicitada por los coleccionistas de todo el mundo. Del artista Georges Maxant aún se conoce poco. Especializado en la pintura sobre porcelana, está documentado en la Exposition Universelle de 1900. Su taller estaba situado en rue Pierre-Levée 3, París. El vaso, de dimensiones monumentales y en buen estado de conservación, es muy decorativo y de gran efecto escénico. Puede presentarse sobre una base o sobre un mueble, para facilitar su disfrute, o en posición ligeramente elevada para visualizar mejor sus pinturas. Se señalan algunas reparaciones del siglo XX. El vaso se compone de tres elementos desmontables.
Época: Segunda mitad del siglo XIX